Mi cámara y yo somos casi inseparables: me acompaña a excursiones, paseos, senderismo, muestras, visitas y exhibiciones. No la llevo cuando sé que no podré sacar fotos; y tampoco la llevo si la excursión de montaña es dificultosa y no deseo poner en peligro mi integridad física (los que practican senderismo saben a qué me refiero).
En septiembre el jefe y yo fuimos unos días a descansar a Pagosa Springs, y entre otras cosas, hicimos una hermosa caminata por el sendero llamado Coyote Hill, que forma parte del complejo de senderos de la San Juan National Forest. En esta oportunidad, todas las fotos que saqué están en modo manual, y el objeto de esta sesión fotográfica fue jugar un poco con el objetivo y sus aperturas, los filtros y la luz. Posiblemente el resultado no es el ideal, pero de a poco uno va familiarizándose con la cámara (es una Nikon 3500) y en líneas generales estoy conforme con el resultado.
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