Honor y memoria para los obreros y los trabajadores manuales, por siempre.
Ese es el mensaje.
Homenaje, emoción y satisfacción que la connotación comunicativa de la escultura kinética a la entrada del Seattle Museum sea de culto y respeto a quienes se ponen al hombro las tareas mas cansadoras, arriesgadas, desgastantes y en las que el esfuerzo, la lucha y el tesón forman parte de la rutina diaria.
El arte y el trabajador se llevan a las mil maravillas. No sé de dónde, alguna vez, salió la idea que los que no enarbolamos distinguidos títulos universitarios no podemos disfrutar y apreciar Arte. Eso no es así.
Por eso agradezco y me siento bendecida al haber podido admirar y disfrutar de este extraordinario Hammering Man.
El responsable creador de esta maravilla de casi 15 metros de alto es el escultor Johathan Bodorofsky. La escultura es propiedad de la ciudad de Seattle, y está frente a la entrada del museo desde septiembre de 1992.
Existen otras esculturas similares en otras locaciones, pero ésta es la mas famosa y significativa.
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