Los todistas son una raza en extinción: especialistas en no tener especialidades; estrategas en no tener estrategias; decididos a no tomar decisiones; carentes de vocación y el sentido especulativo de la conveniencia y la oportunidad. Seren, la señora que escribe en este blog, ha desarrollado, durante su amplio y diversificado paso por el todismo, todo tipo de diligencias laborales dignas de una pesadilla de Borges: lavaplatos, mucama, cartonera, canillita, empleada de veterinaria; barman, camarera, ayudante de sastre, vendedora ambulante, albañil, barista. Ella vendría a ser lo que en inglés se llama 'blue collar', o la gente que no tiene título universitario y desempeña tareas no profesionales. Esta mujer, como el resto de los todistas, tiene un sentido y comprensión estético mas bien ecléctico y difuso. No sabe la diferencia entre Barroco y Rococó; siempre supuso que Manet era Monet ( o viceversa ); o confunde el Art Decó con el Art Nouveau. Escribe con faltas de ortografía, se desentiende de la sintaxis, no entiende dónde van las comas; pero por otra lado, gusta de sacar fotos, martirizar relojes, ir a museos, visitar artistas y contar qué ve y cómo lo siente y experimenta. Señoras y señores, no los entretengo mas: Bienvenidos a Seren Vintage Watch Gallery

Galactic Playground

Santa Fe tiene estas cosas.
Por eso es conocida como la ciudad diferente: The City Different.
Puede ser posible que en un paseo por el Railyard nos topemos en un mismo escenario, día, hora y situación con jubilados jugando a las bochas, gente en situación de calle usando una parilla comunitaria para hacerce el desayuno, un grupo de Sikhs disfrutando del sol, niños de todos los colores y edades jugando con barro y enchastrados hasta el infinito, policías mirando y saludando y volviendo a mirar, personas haciendo yoga, o karate o huevo; imaginen entonces que todos ellos interactuan con un reloj de sol.
Un reloj de sol que es mas que eso: un magma de sensaciones, un contorno, una puesta en escena.
Galactic Playground, creado y mentado por el artista argentino Eduardo Navarro, es un paradigma, un acertijo, un caleidoscopio de ideas.




Una de las bochas cae muy cerca del reloj. La mujer se acerca y mira la frase donde la bocha casi pega. Se ríe.
Uno de los niños se pone a saltar, todo embadurnado de arcilla y arena, entre los colores del reloj. Es una señal.
Una pareja de vagabundos se pone a leer las frases en su camino al albergue. La mujer ríe ante lo disparatado ( o cuerdo ) de muchas de ellas.
Un anciano Sikh ojea la forma de la plataforma. Lleva su mano izquierda al mentón, ensimismado.
La mujer que practica yoga señala el gnomon del reloj al tiempo que otros alumnos ( ¿ o profesores ? )  comentan la novedad en el parque....





En el marco de la Bienal Casa Tomada que se desarrolla en el SITE de Santa Fe se puede disponer de la obra de Eduardo Navarro como mejor plazca: leyendo, pisando, interactuando con el sol, la noche, la lluvia o el ensueño del clima árido y esplendente de Santa Fe. Se puede tocar, pisar, correr, manosear; se pude jugar a ser inventor o alquimista, astrólogo o visionario. El gnomon dictamina, adivina, señala, escatima. El conjunto es una gran alegoría de cruzamientos y deslizamientos.
Lo que no se puede es estar ajeno, desatento o atorado de esquemas purísticos y no prestarle atención a Galactic Playground mientras se está en el Railyard.



Mi marido y yo fuimos testigos del proceso de construcción del reloj.
Y seremos, muy posiblemente, partícipes de su huida a nuevos destinos, embriones o ilusiones en otros meridianos y contextos.

Dejo enlaces para mas información:

http://www.navarroeduardo.com/

https://sitesantafe.org/exhibition/la-casa-tomada/

No hay comentarios.:

Publicar un comentario