Esta hermosísima ciudad fortificada es la capital de la región Alentejo, Portugal. Sus orígenes como población urbana datan de las épocas de los Celtas y antiguos Lusitanos, varios siglos antes de Cristo. Los Romanos la conquistaron en el 57 AC, y le dieron gran importancia estratégica, productiva y militar. Posteriormente cae en manos de los Visigodos, y por mas de 4 siglos, fue territorio Morisco. La liberación de Évora se produce en 1165, y a partir de allí, Évora pasa a ser clave en el armado político y de defensa del Imperio Portugués.
Esta preciosa ciudad guarda muchísimos tesoros históricos, monumentos de las diferentes civilizaciones que la ocuparon; tiene hermosos parques y plazas, un maravilloso acueducto y murallas extraordinarias, templos y edificios de centenarios. Ciertamente, ha sido una visita muy disfrutable.
En las fotos siguientes, verán algunos de los relojes monumentales que visitamos mientras estuvimos allí: el de la Catedral; el de la Iglesia frente a la plaza; un reloj de sol en un parque y el del Palacio Municipal.
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