La ciudad de Nápoles posee una larga e intrincada red de pasadizos y túneles subterráneos que unen distintos puntos de la ciudad. Muchos de esos pasadizos y túneles son acuíferos, canales de agua y rutas de escape concatenadas y ligadas a piletones, tanques de agua, pasajes y cisternas subterráneas.
Ya en épocas griegas y romanas parte de estas cisternas, pasajes y túneles fueron utilizados como mecanismo de defensa y salvaguarda de la población napolitana, la cual ha sufrido 2 mil años de invasiones constantes hasta su inclusión en el Reino de Italia en el siglo XIX. Durante guerras y ocupaciones enemigas (incluida la Segunda Guerra Mundial), esta red subterránea dio cobijo y esperanza a parte de los habitantes y miembros de la resistencia de Nápoles a la espera de mejores tiempos y una pronta liberación.
Cabe destacar tres cosas: primero, existen varios recorridos ofrecidos por diferentes empresas en distintas locaciones y por lo tanto esta no es la única opción de visita a túneles subterráneos; segundo, que la visita a la Nápoles Subterránea dura más de una hora y no es apta para claustrofóbicos; y tercero, hay muchas escaleras, pasajes muy angostos, poca luz, y piso resbaloso. A mi me gustó ir, pero creo que tiene mucha mas promoción de la que merece y mi opinión es que existen otras opciones más espectaculares y mejor coordinadas.
Dejo enlace para más información:
https://www.napolisotterranea.org/en/
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