Bilbao es una ciudades bella, provocadora, maravillosa y en aparente recogimiento. Bilbao es rica, pudiente, culta... encerrada en sí misma; es temerosa del forastero al que arrincona contra las híbridas guías de turismo que no muestran lo mejor que tiene la capital de la nación vasca... su amoroso y atento corazón indomable.
Bilbao se ofrece tímida al recién llegado, retacea sus vistas preciosas, esquiva sus rincones primorosos, pero cuando entra en confianza.... brinda una cuota enorme de atractivo lúdico con una sutil impudicia. Es imposible no enamorarse de este lugar y los bilbaínos. Es imposible no volver.El Puente de Vizcaya ( 160 metros de largo y 61 de altura ) es uno de los grandes atractivos turísticos de esta capital húmeda y lluviosa. La construcción de este transbordador - el primero en el mundo, y llevado adelante por iniciativa privada - duró 6 largos, tortuosos y agotadores años en los que los constructores, proyectistas, financiadores y pobladores de ambas márgenes de la ría del Nervión estuvieron peleándose por las obras. el proyecto, el diseño y el uso que recibiría el transbordador.
Finalmente se inauguró en 1893, aunque la polémica siguió largo tiempo entre su creador y proyectista el ingeniero francés Ferdinand Armorin y el arquitecto a cargo de su construcción Alberto de Palacio. Este primer proyecto dio inspiración a todos los demás puentes transbordadores que existen en el mundo, incluido el de La Boca, el único en el continente Americano.
http://www.puente-colgante.com/index.php/es/
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