Voy a tratar de hacer un ejercicio de imaginación.
Quiero sacar del paisaje del actual New Mexico todo rastro de civilización occidental y quedarme con los adobes, mesas, piñones, largas lenguas de terreno árido, seco, rocoso, silencioso; quiero quedarme con la flora y fauna originaria y los nativoamericanos viajando aquí y allá, a la vera del Río Grande.Es el mismo paisaje que los oriundos de América miraron una y otra vez durante siglos. Y sobre esas misteriosas piedras volcánicas ellos han dejado marca, huella, testimonio de su paso, se sus sueños, de la vida y lo que hay mas allá.
Estos petroglifos, de acuerdo a lo catalogado dentro de lo que hoy es el Petroglyph National Monument, son alrededor de 24 mil con un rango de variación temporal que va desde 3000 ac hasta el siglo XVI para los realizados por los pueblos originarios; y desde mediados del siglo XVI hasta principios del siglo XX para los realizados por los colonos europeos, mestizos y tribus nativo americanas que se establecieron o pasaron por esta región en los convulsionados años post conquista. Muchos de los signos de los primigenios nativos son plantas, personas, animales. Otros signos son un enigma. Enigma que dá al parque un halo de monumentalidad, belleza, misticismo y recogimiento.
Dejo enlace para mas información:
https://www.nps.gov/petr/index.htm
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